Han pasado 8 años desde que el asesino serial conocido como Dexter Morgan se despidió de la televisión con una desastrosa octava temporada y los ecos de decepción que dejó su amarga conclusión todavía resuenan cuando se habla del show. Ciertamente, las primeras 5 temporadas del antihéroe interpretado por Michael C. Hall pudieron haber dejado un legado significante en el mundo del entretenimiento, pero las ganas de seguir lucrando con el éxito del producto llevó a los escritores a cometer el mismo pecado que condenó a Dexter al exilio: no supo detenerse a tiempo. Por eso, no fue sorpresa el escepticismo de la gente cuando este año se anunció Dexter: New Blood - 63%, una serie limitada distribuida por Paramount+ que fue concebida como un control de daños para atar los cabos que quedaron sueltos mientras expande, aún más, el vasto universo del psicópata creado por Jeff Lindsay.
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En New Blood, han pasado 10 años desde que Dexter Morgan fingió su muerte para poder tener una vida tranquila como leñador en una pequeña ciudad de Iron Lake, manteniendo sus instintos asesinos al margen. Sin embargo, la súbita aparición de su hijo y una oleada de crímenes de un homicida emergente pondrán en riesgo el juicio del antihéroe, recordándole que hay huellas del pasado que no se pueden borrar y que los viejos hábitos nunca mueren. En el reparto podemos encontrar al emblemático Michael C. Hall metiéndose en la piel del asesino una vez más, Jack Alcott como Harrison Morgan, Jennifer Carpenter como Debra, Julia Jones, Johnny Sequoyah, Alano Miller, entre otros.
Los primeros cuatro capítulos ya fueron mostrados a la crítica internacional y las primeras reseñas ya se encuentran disponibles en la web. Lamentablemente, el consenso general es desafortunado, señalando como lo que pudo haber sido una oportunidad para redimir a uno de los antihéroes más emblemáticos de la década de los 2000 se convirtió en un revival sin corazón que repite los mismos errores del pasado. Enseguida te platicaremos a fondo sobre los aciertos y errores de este revival televisivo.
Para los medios, New Blood es una miniserie que no consigue justificar su existencia, haciendo nulo esfuerzo por reinventar al personaje o cambiar las reglas del juego con una narrativa más jugosa. Los escritores optaron por darle a esta nueva entrada un tono mucho más serio y sobrio, queriendo darle una atmósfera similar a la vista en la serie de HBO Mare of Easttown - 90%, pero se olvidaron de un detalle importante: gran parte del encanto de la Dexter original era el humor negro que conseguía filtrarse entre el suspenso y el drama, por lo que al suprimir esa cualidad solo queda otro thriller del montón que tiene pocas herramientas para defenderse ante otras producciones contemporáneas que están haciendo algo interesante. En cuanto a la historia, la prensa encontró que este revival parece ser un compendio de tramas descartadas de temporadas pasadas: no tienen progresión lógica, se sienten forzadas, carecen de sustancia, etc. Los personajes secundarios siempre recibieron un tratamiento adecuado en el pasado, pero aquí son presentados como arquetipos risibles que pasan sin pena ni gloria por la trama. Y de Dexter Morgan ni se diga, la crítica no tuvo reparo en señalar como uno de los asesinos seriales más queridos de la televisión se ve reducido a una caricatura de lo que solía ser, viéndose obligado a tomar decisiones tontas que no coinciden con el extenso desarrollo que se le dio: ¿qué clase de criminal retirado con algún rastro de sentido común tendría como novia a una policía y trabajaría en una tienda de armas?
En cuanto a los aspectos positivos, las publicaciones internacionales concuerdan en que lo mejor de este thriller son las actuaciones y la química que existe entre los actores. El regreso de Debra Morgan como la consciencia de Dexter es uno de los aspectos mejor logrados del show, potenciado por una actuación de calidad certificada por parte de Jennifer Carpenter. C. Hall también se nota cómodo regresando al papel que lo catapultó al estrellato, con una actuación multifacética que consigue mantenernos interesados en el relato. El arco dramático de Harrison Morgan, el hijo de Dexter, es un aspecto que llena de vitalidad a una narrativa cansada, llevando la historia por momentos a un lugar intrigante y ofreciendo a la audiencia un personaje interesante en quién fijar la atención. Por último, los asesinatos se mantienen creativos y logran satisfacer la cuota de gore que todos los fanáticos de la original exigían de vuelta.
Finalmente, Dexter: New Blood - 63% es un claro ejemplo de que hay cosas que es mejor dejar enterradas en el pasado. Sin el encanto de la original ni ideas frescas sobre la mesa, esta nueva entrega de Dexter consigue lo inesperado: hacer más profundo el agujero en el que se encontraba sepultada la serie.
A continuación, presentamos una compilación de críticas y reseñas de Dexter: New Blood - 63%:
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Nick Harley de Den of Geek:
Muchas de las cosas que hicieron interesantes sus primeras temporadas han desaparecido (...) no introduce nuevos temas o ideas convincentes que demuestren que este retorno está justificado.
Eric Deggans de NPR:
...Dexter: New Blood revela que volver a intentarlo, sin tener una idea de lo que salió mal la última vez, no conduce a un mejor resultado (...) se siente como si reciclaran tramas descartadas del pasado y las pusieran en un nuevo escenario.
Benji Wilson de The Telegraph:
...todo lo bueno del nuevo Dexter son las mismas cosas que eran buenas del Dexter original. No es una mejora, o algo nuevo en absoluto; de hecho, solo sirve para recordarte lo lejos que cayó esa serie.
Richard Lawson de Vanity Fair:
...esta versión de Dexter es más ingeniosa y sobria (...) los escritores lograron una gran convergencia, ordenando todas las partes dispares de su pasado en un regreso satisfactorio.
Daniel Fienberg de The Hollywood Reporter:
Dexter ha vuelto sobre una base más firme (...) redime algunos de los aspectos tontos de las últimas temporadas y crea una historia más adecuada...
LaToya Ferguson de Variety:
...aunque New Blood ayuda a reemplazar el mal sabor que dejó el final de la serie original, fuera de algunos componentes exteriores, no hace mucho para redefinir a Dexter.
Alan Sepinwall de Rolling Stone:
...sosa e innecesaria (...) Las nuevas aventuras de Dexter están un poco mejor narradas que la última vez que lo vimos, pero la historia ya se siente cansada.
Matt Fowler de IGN:
Dexter regresa mejor que nunca con algunos ajustes y cambios para bien en su fórmula (...) la mezcla de lo antiguo y lo nuevo de New Blood es muy prometedora.
Liz Shannon Miller de Collider:
Un resurgimiento sólido (...) es una mezcla entre el pasado y el presente que da como resultado un personaje completamente realizado.
Matthew Gilbert de Boston Globe:
Los nuevos episodios no devuelven el programa a su antiguo prestigio de ninguna manera; nos regresa a la narración inconsistente de sus últimos años (...) los arcos se vuelven cada vez más forzados y la sangre parece fluir simplemente para llamar la atención.
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