Tony Bennett, cuyo nombre completo era Anthony Dominick Benedetto, ha fallecido hoy en Nueva York a la edad de 96 años, y por el momento no se ha reportado la causa. Bennett fue un destacado cantante y uno de los últimos grandes crooners de mediados del siglo XX. Su legado musical y su voz inconfundible lo convirtieron en una leyenda de la música popular estadounidense, y su impacto perdurará a lo largo de la historia.
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Además de su destacada carrera musical, tuvo varias apariciones en el cine, entre las que destaca la de Todopoderoso - 48%. Mucho antes había actuado en El Óscar, de 1966, Muppets 2: Los Más Buscados - 79% (2014), y las series Rockefeller Plaza (2012) y Blue Bloods (2011), entre otras. Su música también fue parte de la banda sonora de cintas como Guerra de los Mundos - 74% y Mundo Jurásico - 71%, y merece una mención especial el tema "Blue Velvet", popularizado después por Bobby Vinton, que luego sería el tema principal de la cinta de David Lynch, Terciopelo Azul - 93%.
Tony Bennett nació el 3 de agosto de 1926 en Astoria, Queens, Nueva York, y desde temprana edad mostró su pasión por el mundo del espectáculo. A los diez años, ya estaba cantando en eventos importantes, como la inauguración del Triborough Bridge, donde llamó la atención del alcalde de Nueva York, Fiorello La Guardia. Sin embargo, su carrera musical se vio momentáneamente interrumpida por la Segunda Guerra Mundial, cuando se unió al Ejército de Estados Unidos y luchó en el Frente Europeo como soldado de infantería. Participó en la liberación del campo de concentración de Landsberg, y las duras experiencias vividas durante la guerra reafirmaron su ideología pacifista.
Tras el fin de la guerra, Tony Bennett retomó su pasión por la música y se abrió paso en el competitivo mundo del entretenimiento. Fue descubierto por la actriz y cantante Pearl Bailey, quien le dio la oportunidad de actuar como telonero en un espectáculo en el Greenwich Village. Fue entonces cuando el famoso comediante Bob Hope lo vio actuar y quedó impresionado con su talento, lo que llevó a Bennett a emprender una gira junto a él. Fue Hope quien sugirió que cambiara su nombre de Anthony Benedetto a Tony Bennett, y así nació el nombre artístico que lo acompañaría durante toda su carrera.
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En 1950, Bennett firmó un contrato con Columbia Records, una de las principales compañías discográficas de la época. Su primer gran éxito llegó en 1951 con la balada "Because of You", que se convirtió en número uno en las listas de éxitos y vendió más de un millón de copias. Le siguieron otros éxitos, como "Cold, Cold Heart" y "Rags to Riches", que lo catapultaron a la fama y lo consolidaron como uno de los principales cantantes de la música popular en los años 50.
A lo largo de su carrera, Bennett mostró su versatilidad como intérprete, abarcando diversos géneros musicales, desde baladas románticas hasta canciones de jazz. En 1957, hizo una notable colaboración con Count Basie y su orquesta, siendo el primer cantante de música popular en trabajar con el legendario director de orquesta y músico de jazz.
Uno de los momentos más memorables de la carrera de Tony Bennett llegó en 1962, cuando grabó su canción emblemática, "I Left My Heart in San Francisco". Esta icónica balada se convirtió en un himno de la ciudad y le valió a Bennett dos premios Grammy. La canción se convirtió en un himno de la ciudad y ha sido calificada como una de las cien mejores canciones de todos los tiempos. Sin embargo, a pesar de su éxito, la popularidad de Bennett sufrió un declive durante la era del rock and roll, lo que lo llevó a enfrentar problemas económicos y personales.
En 1966, Bennett intentó suerte en el cine con la película El Óscar, pero no recibió buenas críticas y decidió centrarse nuevamente en su carrera musical. Sin embargo, los cambios en las tendencias musicales y la creciente popularidad del rock afectaron su carrera y lo llevaron a un período de crisis en las décadas de 1970 y 1980.
En su extensa trayectoria, Bennett ganó un total de 19 premios Grammy, incluyendo el premio Lifetime Achievement Award en 2001. Además, recibió dos premios Emmy y fue honrado como NEA Jazz Master y Kennedy Center Honoree. Su legado musical se vio enriquecido por su habilidad para conectar con el público y emocionar a las audiencias con sus interpretaciones únicas y emotivas.
Durante los años 90 y 2000, Tony Bennett continuó realizando proyectos exitosos, incluyendo una serie de álbumes de duetos con artistas contemporáneos como Lady Gaga, Amy Winehouse, John Mayer, Elton John y otros. Estas colaboraciones le permitieron llegar a un público más amplio y mantener su relevancia en la industria musical.
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