Josh Gad reclama que no hizo una representación digna de la comunidad LGBT con su personaje en La Bella y La Bestia

En 2017, Bill Condon fue elegido para dirigir la versión el live-action de uno de los clásicos de Disney más importantes: La bella y la bestia - 71%. En esta adaptación se contó con Emma Watson y Dan Stevens como protagonistas. La presencia de Watson ya era bastante llamativa para sus fans, sin embargo, la popular compañía decidió dirigir su campaña publicitaria previa al estreno por otro camino. En ese momento aún era nuevo que las producciones anunciaran que habría diversidad en las mismas, y la casa del ratón aprovechó la tendencia.

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Durante mucho tiempo fue noticia que esta cinta tendría al primer personaje abiertamente gay en una película perteneciente a Disney. Era una gran novedad por lo que hasta ese entonces parecía difícil de ver. Sin embargo, lo que muchos esperarían que fuera una representación homosexual directa y digna para la comunidad, se resumió a una pequeña escena en donde LeFou cambia a su pareja de baile femenina por un hombre.

Esto generó mucha conversación, es cierto que Disney no se aventuraría a tener acercamientos más inclinados a lo sexual o físico, pero el hecho de que su campaña se haya enfocado casi exclusivamente en ese personaje elevó las expectativas de sobre manera, y al final fue decepcionante. Hasta hoy todavía muchos dudan que este personaje merezca ser calificado como el primer gay en una cinta de Disney.

Ahora quien se pronuncia al respecto es el mismo Josh Gad, quien dio vida a LeFou, y no es precisamente para defender lo que pasó con su personaje en la película. Contrario a lo que se esperaría, el actor se dijo decepcionado con el resultado, pero, sobre todo, no cree que esa sea una representación suficiente o digna de la comunidad. A continuación, puedes leer las declaraciones que compartió con Independet.

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[La película] no fue lo suficientemente lejos. No fuimos lo suficientemente lejos como para merecer elogios... No fuimos lo suficientemente lejos como para decir: 'Mira qué valientes somos'. Mi pesar por lo que pasó es que se convirtió en 'el primer momento explícitamente gay de Disney' y nunca tuvo la intención de ser así. Nunca tuvo la intención de ser un momento por el que deberíamos elogiarnos, porque, francamente, no creo que le hiciéramos justicia a lo que debería ser un personaje gay real en una película de Disney. Si vamos a darnos palmaditas en la espalda, maldita sea, deberíamos haber ido más allá con eso. Todos merecen la oportunidad de verse a sí mismos en la pantalla, y no creo que hayamos hecho lo suficiente.

Hasta el año pasado, la poderosa compañía tenía entre sus planes llevar a su plataforma de streaming una serie que funcionaría como precuela de La Bella y la Bestia que se enfocaría en los viajes y aventuras de Gastón y su lacayo LeFou. Meses más tarde el proyecto quedaría cancelado de manera indefinida. Cabe mencionar que en 2019, mientras promocionaba Frozen 2 - 80%, en donde Gad da voz a Olaf, el intérprete le aseguró a SiriusXM Radio que estaba orgulloso del resultado de su papel en el live-action e incluso que la escena ya mencionada fue idea suya.

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Esto es lo que decidimos: el final feliz de LeFou sería bailar con otro hombre. Fue idea mía, así es como realmente quería que terminara la película. Me sorprendió mucho que nos dejaron hacerlo. Luego se convirtió en algo controvertido, aparentemente, a pesar de que sólo fueron tres segundos en pantalla. Nunca nos centramos en ello ni tuvimos la intención de hacerlo, pero se convirtió en una controversia confusa y extraña.