Sin duda, Disney no ha perdido el toque como compañía cinematográfica, prueba de ello es lo que logró hace tres semanas en taquilla mundial con las dos películas que llegaron a la cartelera en días muy cercanos. Thor: Ragnarok - 92% de Marvel Studios y Disney, así como Coco - 97% de Disney/Pixar, son los éxitos más recientes de la compañía fundada por Walt Disney ; y ambas no han dejado de tener grandes números recaudados en taquilla, específicamente en México, Coco ha arrasado con las entradas y con el buen recibimiento por parte del público.
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Para los creadores de esta película animada en la que participa Gael García Bernal, la gran incógnita, y al parecer lo que más les preocupaba, era cómo iban a reaccionar los mexicanos ante la cinta. Si les gustaría o no, si se sentirían identificados o si podrían sentirse ofendidos por el resultado. Y es que la base para la creación de la historia, como es evidente, es la cultura mexicana, desde los colores, las tradiciones, las costumbres y la imagen de la familia.
Según información compartida por The Playlist, hasta el momento Coco ha recaudado más de USD $43 millones tan sólo en México, lo cual es un récord en el país, y además superaron las expectativas de los creadores: Darla K. Anderson, productora, Lee Unkrich, director, y Adrian Molina, escritor y co-director. El equipo confesó que no estaban muy seguros de la respuesta en este país, además se habían topado con otro gran obstáculo, hace tres años se estrenó El libro de la Vida - 82% y era evidente que habría comparaciones. Estas fueron algunas de las palabras de Unkrich:
Para nosotros en muy gratificante que las personas hayan respondido tan bien como lo han hecho hasta ahora. No hay forma de garantizar el éxito de una película. A pesar de lo duro que trabajamos podría haberse descartado fácilmente por ser una película hecha por extraños sobre su cultura, y era posible que no la aceptaran, pero sucedió todo lo contrario. Fue muy bien recibida.
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Como se mencionó líneas atrás, en 2014 se estrenó El Libro de la Vida, justo cuando la producción de Coco estaba a medias, para los creadores existía un gran riesgo de que la historia fuera similar ya que ambas estaban inspiradas en el Día de los Muertos. Pero la película dirigida por Jorge R. Gutierrez fue por completo diferente: también se inspiró en el estereotipo del músico mexicano, pero en su desarrollo muestra claramente el dualismo entre el bien y el mal en los vivos, y uno de los protagonistas viaja al Mundo de los Muertos para salvar a quien ama.
Según palabras del también director de Toy Story 3 - 99%, en algún momento el equipo se sintió desilusionado porque creyeron que el proyecto en el que habían trabajado desde el 2010 ya no tendría futuro; para estar seguros de lo que decidirían más adelante fueron a ver la película que produjo Guillermo del Toro y estuvieron seguros de continuar una vez que confirmaron que la historia no era la misma. Evidentemente, durante los años que pasaron en el proceso creativo, la película fue tomando una forma diferente a la que se tenía en un principio, lo que les ayudó incluso para la buena recepción que hasta hoy han tenido fueron las asesorías que tuvieron por parte de colaboradores mexicanos como las representantes del Self Help Graphics & Art de Boyle Heights en Los Ángeles, institución artística en la que cada año se hace una celebración especial del Día de Muertos; también colaboraron escritores mexicanos, dramaturgos y la representante del L.A. Theater Center, quien hizo muchas de las propuestas musicales. Ellos son quienes alentaron al equipo a hacer una representación de la cultura mexicana lo más cercana posible a la realidad.
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Según Adrian Molina, lo único que cambió en la historia cuando pasó por otro tratamiento, fue lo visual y algunos contextos, así como la manera en la que Miguel regresaría al mundo de los vivos; pero siempre se mantuvo presente la idea original: un niño que ama la música, su familia no lo comprende y pasa una gran aventura en el mundo de los muertos para conseguir ayuda. También hablaron de lo importante que fue para ellos visitar Guanajuato para inspirarse en los edificios del fantástico mundo que siempre están en construcción. El arte y la arquitectura del estado les ayudaron para la realización del cargado y colorido diseño de la película.
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