METE-CRITICA | Star Trek: Lower Decks, reírse de un clásico para revitalizarlo

Después de casi sesenta años de su creación, vaya que a la franquicia de Star Trek siempre caracterizada por la sobriedad en su tratamiento enfocado en llevar la aventura a la reflexión acerca de las relaciones humanas; le cae de maravilla el grado de comedia que alcanza en la que apenas es su segunda incursión dentro del campo animado, Star Trek: Lower Decks - 80%.

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Es una delicia el neurótico manejo del bombardeo de diálogos alimentados por la mala leche característica del cocreador de Solar Opposites - 100% y también guionista de Rick and Morty - 100%, que aquí sirve para transgredir las clásicas figuras del Capitan espacial y su tripulación de alta estatura moral, con sus posturas aleccionadores, impolutos códigos de convivencia y formas militares, en episodios salpicados de un interminable número de referencias a personajes y pasajes legendarios del universo creado por Gene Roddenberry , que le reivindican como un cariñoso homenaje. Y qué decir de como lo aprovechan para abrir la puerta a divertidas y poco usuales situaciones dentro del mismo, que van de delirantes contagios tipo zombie, a inesperadas borracheras de héroes militares Klingon y otras linduras.

Sin embargo eso no es todo, lo mejor es que la propuesta va más allá de la parodia simple para bordear la autocrítica, empezando por sus protagonistas quienes como el título lo indica, son miembros de una sección menor dentro del engranaje de tripulantes de la el nave U.S.S. Cerritos, lo cual es ideal para mirar desde abajo a las altas cúpulas, y evidenciar las circunstancias con las que tiene que lidiar el ciudadano de a pie, al margen de la exploración a gran escala y los conflictos de magnitudes cósmicas que en este caso son más bien el telón de fondo. Así entonces, tenemos a un sujeto obsesionado con las reglas, quien por su “ñoñez” y servilismo se vuelve objeto de burlas; a una chica heredera de una familia militar, cuya irreverencia le ha costado ser relegada a dicho equipo; ademas de la consabida novata idealista y un colega con implantes cibernéticos tan brillante como amable.

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Es del contraste de tales personalidades, en relación con un entorno desromantizado, que se ponen sobre la mesa temas como la intransigencia de un sistema futurista espacial que a pesar de los avances no deja de ser burocrático e incluso nepotista, así como el clasismo y la normalización de la irresponsabilidad. Claro, cómo decíamos todo esta impulsado por el humor y viene revestido por el encanto de la nostalgia. Es por ello que Star Trek: Lower Decks, así como rinde tributo a un concepto que siempre ha abordado la reflexión social con inteligencia, también le cuestiona para enriquecerlo de una manera muy divertida, para convertirse en una más que agradable sorpresa.

La serie, luego del buen recibimiento que ha tenido por parte del público, está a la espera de su tercera temporada y se puede ver en Paramount Plus, plataforma constituida como la nueva casa de todos los Trekkies.

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