Director de 'Te nombré en el silencio' dice que la película es un vehículo para generar empatía

En México, las desapariciones forzadas son un tema alarmante desde hace años. En el cual los gobiernos y las autoridades hacen poco para reducir el número de desaparecidos o para ayudar a localizar a estas personas. Son las familias de las víctimas quienes emprenden exhaustivas búsquedas para encontrar por lo menos una pista del paradero de sus hijos o familiares. En los últimos años, el cine mexicano se ha encargado de abordar esta dolorosa realidad en cintas como Tempestad - 91%, Sin Señas Particulares - 100%, La Civil - 94% y Te nombré en el silencio - 100%.

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Te nombré en el silencio - 100% es un documental que retrata a Las Rastreadoras de El Fuerte, un grupo de madres de personas desaparecidas en el norte de Sinaloa que, ante la ausencia de las autoridades, salen dos veces a la semana con picos y palas en busca de los restos de sus hijos. En Tomatazos, entrevistamos a Jose María Espinosa de los Monteros, director de este largometraje mexicano para conocer más detalles del proyecto.

Iniciamos la conversación con el director de este documental preguntándole cuáles fueron las motivaciones detrás de la cinta. Él nos compartió que la principal motivación nació a partir del contexto en el que creció, un municipio violento, como muchos otros en este país. Aseguró que eso es algo que afecta de manera directa en todos los seres humanos.

A mí lo que me motiva inicialmente para contar esta historia es de dónde vengo, Culiacán, Sinaloa. Sabemos que es una tierra históricamente azorada por la violencia. Entonces, desde muy temprana edad todo eso te va afectando de manera directa o indirecta y vas creciendo o vas madurando como ser humano y hay ciertas preocupaciones que permanecen de manera constante en tu mente y es cómo le damos solución a todo esto, a todo lo que está pasando a nuestro alrededor. Tengo la fortuna de tener este oficio, de crear algo para poner mi granito de arena, por ese lado a nivel personal.

El cineasta detallo que la idea de esta cinta nació después de realizar un cortometraje acerca de la violencia, el cual les dio la oportunidad de conocer a Mirna, la protagonista de Te nombré en el silencio - 100%. Una vez que el director la entrevistó y conoció su historia de primera mano, fue que decidió apostar por un largometraje, ya que todos los hechos no se hubieran ajustado a la duración de un cortometraje.

Por otro lado, tuve la oportunidad a través de un cortometraje que hicimos de normalización de la violencia, ahí conocimos a Mirna, y cuando yo le hice la entrevista con Mirna ya no estaba recibiendo la información a través de artículos o reportes, sino que estaba viéndola directamente ahí, sintiendo esta perdida, todo este dolor. Esa entrevista me dejó patinando varios días emocionalmente y luego dije, "esto no es para un cortometraje, es para un largo", se lo propuse a Mirna y ahí empezó

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Hablar de la pérdida, la muerte, la ausencia y el dolor a través del cine, suele ser un ejercicio complicado y devastador tanto para los protagonistas de un documental como para sus creadores, por lo que le pedimos al director que nos compartiera de qué manera se había preparado a nivel emocional para afrontar cada una de las diferentes etapas de producción de su largometraje.

Es exactamente como lo dices y es curioso que lo digas de esa manera, porque sí son diferentes etapas donde por lo menos para mí, que soy una persona hipersensible, no deja de afectarme. Hace poco me preguntaron por qué no voy ahorita que estamos teniendo funciones en las universidades y solo voy a las sesiones de preguntas y respuestas. Porque me duele ver la película. Todavía me pone como en un plano emocional, la película también tiene esperanza, por supuesto, pero a mí personalmente me pone... Lo que le digo, no quiero pararme en la sesión de preguntas y respuestas y estar llorando, quiero estar concentrado y en una charla real con ustedes, por eso no voy.

Después de compartirnos esta experiencia, el director aclaró que definitivamente no existe forma de sobrellevar toda la carga emocional que implica un proyecto con estas características. Sin embargo, apuntó que la terapia psicológica es una alternativa.

Yo creo que no hay preparación para este tipo de proyectos, lo que podemos hacer es catarsis y mi catarsis la realidad es que fue el llanto. Ser vulnerable en el sentido en que me puse. Esto está pasando enfrente de ti, estás escuchando a alguien revelar todo este dolor, de alguna manera es un cierto sentido de acompañamiento. Por ejemplo, Horacio, nuestro editor, entró a terapia después de un mes de estar editando, después de estar viendo todo este material, seis horas de material, me dijo "yo la neta necesito entrar a terapia, porque tengo lidiar de alguna manera con esto que estamos haciendo". Pero uno sabe a qué le está entrando desde el principio.

Te nombré en el silencio - 100% es una cinta que se realizó sin el financiamiento de fondos gubernamentales. En su lugar, el director y productor decidieron recurrir a ONG's para financiar el proyecto. Espinosa comentó que esto tuvo enormes ventajas para el largometraje, ya que les permitió filmar en sus propios tiempos el documental.

Las dificultades del proyecto yo creo que llegan desde el financiamiento. Porque es un proyecto independiente a los fondos gubernamentales. Desde ahí empezaron los problemas, digo, pronto se fueron solucionando, poco a poco. En ese lado entró nuestro productor, Juan Pablo, mi hermano mayor, para financiar la película a través de ONG's, él es activista y tenía ciertos conocidos por ahí, por donde pudimos entrar a estas ONG's y que le metieran cierto dinero a la película. A través de eso se financió y le vino bien a la película conseguir dinero, filmar parar, luego otra vez, conseguir dinero, filmar, parar, porque de alguna manera yo puede tener tiempo para pensar lo que quería. Es mi primera película y mi primer documental sobre todo. Creo que esa pauta que te da estar parando constantemente, aunque dure cinco años, vale la pena

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No obstante, el financiamiento de la cinta no fue el único reto que enfrentó esta producción. Las dificultades fueron más allá, el director nos compartió que enfrentaron situaciones de alto riesgo mientras buscaban filmar la verdad.

Otros de los retos, fueron en el rodaje, percances con el narco, nos tiraron de balazos en una ocasión en que estábamos buscando un cuerpo en un paraje ahí medio desolado de Los Mochis. La realidad es que hay que hacer notar cómo reaccionaron ellas, no hubo pánico, nada de lo que esperarías, solamente se rastreó más rápido, se hizo conciencia de lo que estaba pasando y luego nos fuimos. Pero te repito, de alguna manera sabes a lo que te estás metiendo cuando haces este tipo de proyectos. Todo el crew supo desde el día uno, yo se los dije, en esto vamos arriesgarnos porque ellas se están arriesgando y así es esto. Todo era conciencia plena de lo que se estaba haciendo

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Cuestionamos al director acerca de si en algún momento estos incidentes lo llevaron a pensar en abandonar el proyecto o a quedarse solo con lo que ya habían filmado. Con toda seguridad en sus palabras, él nos respondió que esa nunca fue opción y al contrario, vivir eso lo hizo reafirmar su compromiso con el proyecto.

No, la verdad no, porque mira para mí esos sucesos no hacen más que ponerme en claro en la cabeza la admiración que tengo por ellas y por lo que hacen. Yo creo que al contrario, ese tipo de cosas lo que hacen es reafirmar o reforzar el compromiso que tienes con el proyecto y la importancia que tiene contar esta historia cuando tienes todos estos factores externos.

El realizador subrayó que para él era importante retratar la dualidad de Las Rastreadoras del Fuerte, pues aunque viven bajo el dolor de la pérdida, para él también era necesario mostrar que son mujeres valientes y empoderadas.

A veces tenemos una idea de lo que es una víctima, es decir, nos imaginamos a la víctima que ve todo a través de un velo negro, a la víctima que está cabizbaja, que está llorosa y me da mucho gusto haber encontrado esta realidad, poderla haber capturado, esta dualidad dentro de la vida de las rastreadoras. Por un lado tienen la sombra, tienen un gran dolor, una gran pérdida, una gran angustia de tener a sus hijas, hijos, familiares desaparecidos, pero también por otro lado hay una luminosidad impresionante, este ímpetu por seguir viviendo, son mujeres empoderadas que se echan para adelante, valientes, resilentes, esto es lo que para mí más me gusta de la película.

Espinosa comentó que dirigir este documental le dejó muchas lecciones a nivel personal y una de ellas es cómo hacerle frente a la tragedia.

Me deja muchísimas lecciones. Lecciones personales para mi vida y la principal lección es cómo hacer frente a la tragedia con endereza. Que yo creo que ellas tienen todo en contra, absolutamente todo en contra y aún así salen adelante. Eso para mí es una gran lección.

Finalmente, Espinosa agregó que espera que su documental lleve al público a la reflexión y a tomar conciencia acerca del tema de las desapariciones forzadas. De igual manera, espera que su trabajo sea un vehículo para empatizar con Las rastreadoras del fuerte y sus extraordinarias labores.

Yo lo que quiero que la gente saque de esta película es, simplemente ponerse en los zapatos, en este caso, en los tacones de las rastreadoras. Que hagamos conciencia, para mí esto es un vehículo para generar empatía. Es un vehículo para romper esa burbuja en la que vivimos, como dijo Mirna en el documental: "no nos tiene que pasar para involucrarnos". Esto es algo que nos compete a todos. Son nuestros desaparecidos, no solo son de los grupos y el gobierno. Yo lo que espero es una reflexión y, si se puede, un accionado de parte de la gente, porque situaciones extraordinarias, requieren acciones extraordinarias.

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