Tribus de Europa | Top de críticas, reseñas y calificaciones

Lo que nos depara el futuro siempre ha sido una de las muchas interrogantes filosóficas presentes en cada uno de los seres humanos desde el momento en que empezamos a desarrollar un sentido de autoconsciencia. Cuestionamientos del tipo: ¿cómo será la vida dentro de 10, 20, 30 años? ¿Cuál será mi rol en esa sociedad que está por venir? ¿El futuro traerá consigo un panorama mejor o peor al que se vive en la actualidad?, empiezan a generar dentro de nosotros un concepto o idea de todo aquello que podría llegar suceder. Una de las interpretaciones más comunes para el futuro es la distopía, una visión en la que la sociedad se encuentra en decadencia y en el cual las condiciones de vida humana son extremadamente malas como consecuencia de la opresión, guerras, el agotamiento de recursos naturales, etc. La naturaleza sombría de estos mundos post-apocalípticos busca hacer una crítica a aspectos sociales, políticos y morales, impulsando la idea de que, si no hacemos algo en el presente para cambiar todas aquellas cuestiones que no propicien un entorno favorable para el desarrollo, nos estaríamos encaminando a un escenario similar o peor al retratado en aquel presagio.

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El concepto de mundo distópico ha dado pie a numerosas representaciones, muchas de la cuales han tomado forma a través de la literatura, el cine y la televisión con diferentes tipos de géneros como lo son el terror, la ciencia ficción, la aventura, el drama e inclusive la comedia. Los aspectos más comunes en lo que respecta a la distopía incluyen sociedades envueltas en guerras eternas, divisiones de clases sociales, condiciones económicas desfavorables para la mayoría de las personas, devastación ambiental, anarquía y pérdida de la individualidad. Ejemplos de esto hay muchos, desde largometrajes clásicos como Mad Max - 91% (1979), Blade Runner - 90% (1982) o Brasil - 98% (1985), hasta cintas recientes que buscan trabajar con el mismo concepto, pero enfocado a las nuevas generaciones como Los Juegos del Hambre - 84% (2012) o Ready Player One: Comienza el Juego - 78% (2018). Y la televisión no se ha quedado atrás, entregando producciones como The Walking Dead - 92% (2010), Black Mirror (2011), Los 100 (2014), Westworld - 89% (2016), The Rain - 88% (2018) y la más reciente propuesta alemana de Netflix, Tribus de Europa - 69%, de la cual hablaremos a continuación.

El creador de la serie, Philip Koch (Friend Request, 2016), se inspiró en los acontecimientos recientes donde se llevó a cabo una votación cuyo objetivo era que el Reino Unido abandonara la Unión Europea (Brexit), para escribir los borradores de un escenario postapocalíptico en el que los estados de la vieja Europa habían sido destruidos, como consecuencia de esto la sociedad se desintegraría para formar tribus individuales, estos bocetos después se convertirían en el concepto final de Tribus de Europa. Es el año 2074, el mundo tal como lo conocemos se ha derrumbado tras una catástrofe tecnológica en 2029 conocida como “Diciembre negro”, los sobrevivientes a aquel suceso comenzaron a construir una nueva sociedad en la cual reagruparse en tribus o facciones distintas es la forma de sobrevivir. La trama gira en torno tres hermanos: Kiano, Liv y Elja, de la tribu Origine que habita en el bosque, cuya pacífica existencia se ve interrumpida cuando un avión no identificado es disparado desde el cielo sobre su aldea; al acudir al lugar del incidente hallarán no solo restos de tecnología avanzada si no al piloto herido de la tripulación, el cual les asignará una misión de alto riesgo que cambiará sus vidas para siempre. El reparto incluye a Oliver Masucci (Dark - 84%, 2017), Henriette Confurius (Golden Twenties, 2019), Emilio Sakraya (Warrior Nun - 80%, 2020), David Ali Rashed (Das perfekte Geheimnis, 2019) y Melika Foroutan (Pari, 2020).

Las primeras críticas de la serie concuerdan en que uno de los puntos más sólidos del proyecto es la construcción que hay detrás de la tribu antagónica, “Los Cuervos”, quienes son presentados como un grupo violento, primitivo y salvaje, pero que se mantienen fieles a un estricto código de ética que les exige ser honestos en todo momento; destacando que conforme avanzan los episodios nos adentramos en la dinámica interna de esta pequeña sociedad llena de matices, conocemos su historia, cuál es la causa de su ambición por dominar en un mundo decadente, cómo han sobrevivido a través de su doctrina hedonista, logrando evitar caer en la construcción de villanos unidimensionales que terminan siendo más un acompañamiento “de fondo” para el héroe o protagonista y no un ente individual por sí solo.

Otro aspecto aclamado por los medios especializados son los arcos narrativos tanto de Kiano, interpretado por Emilio Sakraya, como el del dúo compuesto por Elja (David Ale Rashed) y Moses (Oliver Masucci). Con respecto a Kiano, no sólo destacan el compromiso de Sakraya para ofrecer una interpretación cautivadora desde su primera aparición, si no que hacen énfasis en como su paso por la fortaleza de “los Cuervos” es responsable de los momentos más tensos de toda la serie; este momento clave termina construyendo una dualidad dentro de él que evoluciona progresivamente a lo largo de los 6 capítulos, causando en la audiencia una intriga genuina por ver la resolución final del personaje. Por otra parte rescatan el trabajo hecho por la dupla Elja-Moses, quienes dentro de la historia representan a los arquetipos de ficción clásicos: el héroe y el mentor, sin caer demasiado en los convencionalismos que este tipo de relación genera, dándole vida a la serie con sus momentos de alivio cómico que, gracias al sobresaliente trabajo hecho por los escritores, no rompe con el tono serio previamente establecido en la serie si no que complementa la narrativa causando que la dinámica sea entretenida. No obstante, algunos críticos tachan el arco de Liv (Henriette Confurius) como demasiado predecible, ofreciendo muy poco desde el punto de vista creativo e incluso rompiendo en algunas de sus escenas con el ritmo que estaba tomando la narrativa, lo cual es alarmante teniendo en cuenta que ella es parte de los protagonistas principales.

El trabajo de diseño realizado por Julian R. Wagner (The Titan, 2018) obtuvo méritos por transportar al televidente dentro del caótico mundo de las tribus con éxito, ya que la escenografía presentada propicia en todo momento un sentimiento de desolación y suciedad, siendo indiferente si se trata de interiores o exteriores. De igual forma, el vestuario de Thomas Oláh (El Médico, 2013) es calificado como fundamental para generar la identidad de cada grupo, siendo cuidadosa de mantenerse distintiva sin caricaturizar a los personajes e incluso reflejando la psique de ellos en mayor o menor medida. El toque final es el resultado de la suma entre la fotografía de Christian Rein (Tal Vez Es Para Siempre - 29%, 2014) con la edición final, aprovechando al máximo los recursos visuales de la serie, así como la utilización de las paletas de colores para mostrar el contraste entre la percepción del nuevo mundo contra las distintas sociedades; esas diferencias radicales de brillo-exposición ayudan a poner al público en los ojos de los personajes, haciéndolo participe de su entorno.

Sin embargo, así como los críticos encontraron puntos positivos, también encontraron aspectos negativos que tienen un peso considerable a la hora de evaluar a la serie como producto final. Uno de esos aspectos es que durante la trama suceden tantas cosas al mismo tiempo que muchas ideas no se terminan de desarrollar por completo, sobre todo en el tramo final donde parece que se centraron más en sembrar las bases de lo que será la posible segunda temporada, olvidándose de cerrar los arcos de cada protagonista como es debido. Otro punto que juega en contra de la producción alemana es que tarda demasiado en arrancar, lo cual no sería un problema si no se tratara de una mini serie de 6 capítulos; esto le termina por pasar factura en el sentido de que si construyes suspenso durante 5 episodios y en el capítulo final no ofreces una resolución, se torna en una decisión completamente anticlimática, por lo que causará que algunos dejen la serie inconclusa, o bien, televidentes que lleguen al final pero que no lo suficientemente enganchados como para mirar una segunda entrega. La última cuestión que generó ruido entre la prensa fue la elección de idiomas para la serie, el cual es una mezcla de inglés-alemán; para algunos fue una elección acertada, que aporta autenticidad a la serie e inclusive que es realista al reconocer que de existir un futuro así, estaría constituido por hablantes de distintas lenguas, pero para otros, esta mezcla de idiomas no aporta nada a la historia, afirmando que hay momentos donde el mal acento alemán de algunos actores hace que los diálogos carezcan de naturalidad, volviéndose un elemento que sale sobrando.

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En conclusión, Tribus de Europa es una serie alemana sólida que cautivará a los devotos de las distopías y la ciencia ficción. La serie se siente más como un preludio de lo que está por venir en futuras temporadas que como una historia completa, pero los elementos que hay de por medio son suficientemente efectivos para mantener el interés en el televidente a lo largo de sus 6 episodios.

A continuación, presentamos una compilación de críticas, reseñas y calificaciones de Tribus de Europa - 69%:

Anne Marie Conlon, New Scientist:

... nos trae un futuro de pesadilla: un mundo sin tecnología.

Tracy Palmer, Signal Horizon:

... es una historia de apocalipsis llena de acción, sorprendentemente sincera, a veces divertida y extrañamente sexual.

Rama Tampubolon, Rama's Screen:

Es muy difícil saber si será el nuevo éxito alemán de Netflix después de Dark, pero el final de este programa me dejó queriendo más.

Pete Peppers, PetePeppers.com:

Es un mundo brutal, pero muy creíble.

El staff de Movie Emporium:

La serie tiene mucho potencial y mucho contenido atractivo, pero necesitan dejar que dure mucho más...

Ruby, The Ruby Tuesday:

Me gustó lo que hicieron y me gustó hacia donde van, hacia el final hay escenas decentes de acción... es un mundo muy realizado.

Greg Wheeler, The Review Geek:

... tiene suficiente aplomo para recomendar, pero también tiene más de unos pocos defectos en su espalda, lo que perjudica sus posibilidades de convertirse en la excelente fantasía que tan fácilmente podría haber sido.

Karina "ScreamQueen" Adelgaard, Heaven of Horror:

El episodio 1 de Tribes of Europa no me convenció. En absoluto.

Martin Schwickert, De24News:

Después de todo, los "creadores de miedo alemanes" siempre son bien recibidos por la comunidad internacional de streaming.

El staff de Aroged:

... podría haber sido una grata sorpresa, gracias a un escenario que, por sobreexpuesto que fuera, podía reservar algunas sorpresas. La serie de Netflix, en cambio, prefiere ir a lo seguro, sin correr riesgos, renunciando a ser una producción incisiva.

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