¡El Festival de Cine de Los Cabos aún no termina y gracias a él pudimos ver otro filme que anduvo muy exitosos por Venencia! Hablamos de Van Gogh en la Puerta de la Eternidad - 77%, película Julian Schnabel que retrata los últimos años en la vida de Vincent Van Gogh, pero que, a diferencia de la obra del famoso pintor, no se limita a presentar una figura impresionista de su personaje principal sino que se preocupa por darle relieve.
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Con Willem Dafoe como Van Gogh, actuación que fue galardonada en el festival de la famosa ciudad italiana, la película narra la estancia que tuvo el pintor en París pocos años antes de que muriera a causa de un balazo en el estómago y de que su familia lo recluyera en una institución mental ante el declive de su sanidad y estabilidad emocional. El filme también, repasa el famoso incidentes, en el que el artista decidió cortarse la oreja.
At Eternity’s Gate es un poema trágico y aunque podría pensarse que es un cliché representar al pintor como un artista atormentado, Schnabel utiliza elemento del lenguaje audiovisual como el color o la voz en off para enfatizar la perspectiva de Van Gogh y así centrarse más en el aspecto emocional de su historia y personalidad, con lo que da más peso a sus problemas mentales que a su obsesión por pintar.
El director estaba muy consciente de que el punto fuerte de la película es Dafoe. El aclamado actor es objeto de varios close ups en momentos cruciales de la vida de su personaje, como si la cámara quisiera sacarle del rostros las respuestas a las preguntas sobre su vida. Y ese claustrofóbico efecto que el plano consigue ayuda también a reproducir la sensación de cautividad y locura hacia la que el pintor se acerca conforme la trama avanza.
Otro elemento destacado es la forma en la que el libreto confronta a Van Gogh, hay tres o cuatro diálogos entre el pintor y alguien más en los que se discuten su sanidad mental, su estilo artístico y su vocación de artista. Esto funciona para acercar al público a la mente del protagonista y se sostiene, una vez más, en la actuación de su actor principal. Resulta interesante que no hay escena del corte de la oreja ni planos en los que se vea la herida, como si Schnabel viera en ese famoso acontecimiento una anécdota que no alcanza a explicar lo complicado de su personaje.
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Hacia el tercer acto de la película, hay algunas tomas de cámara subjetiva y otras más con un filtro de color amarillo que proponen que la idea de que Van Gogh era demasiado sensible a la luz y ese era el motivo de su estilo artístico, así como de la necesidad que veía en reproducir los paisajes que lo maravillaban y que gracias a su mano podemos disfrutar en su obra.
“Cuando veo paisajes, veo la eternidad”, dice Van Gogh en la película. Van Gogh en la Puerta de la Eternidad - 77% es un retrato, pintado con extremo detalle, de uno de los artistas más conocidos de la historia que no se conforma con repasar su pincel por las líneas que ya todos conocemos, sino que con cada escena y diálogo se preocupa por hacer algo nuevo y capturar una mirada detallada a los últimos años que tuvo un artista que nunca vio éxito en vida, pero que probablemente ganó, a través de la obra que justo persigue ese fin, la eternidad.
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